El proyecto «Río Con-voca», impulsado por la organización Descubriendo y apoyado por el Fondo Común Regenerativo de Fundación Lepe, combina esfuerzos educativos, iniciativas turísticas sostenibles y acciones comunitarias para avanzar en la protección del río Cochrane. Su objetivo es invitar a la comunidad y a los visitantes a involucrarse activamente en la regeneración de los ecosistemas fluviales y en la promoción de una conciencia ambiental.
El río Cochrane, situado en la región de Aysén, es un curso de agua de gran valor ecológico y cultural. Sin embargo, enfrenta diversos problemas que comprometen su salud y la de los ecosistemas que dependen de él. Entre las principales amenazas se encuentran la contaminación de sus aguas por residuos sólidos, los microbasurales, la disminución de la biodiversidad acuática y terrestre, la falta de planificación territorial y la pérdida de acceso al río.
Desde 2014, un grupo de jóvenes unidos a través de la organización Descubriendo, trabaja para fomentar una conexión respetuosa con el río y su biodiversidad, promoviendo prácticas sostenibles mediante el turismo responsable y la educación ambiental. Cristian Restrepo, co-fundador de Descubriendo, explica que «es una iniciativa enfocada en la exploración, conservación y puesta en valor de los recursos naturales y culturales. Nuestro objetivo principal es promover la vinculación de la comunidad y actores públicos y privados hacia la cuenca del río Cochrane para su protección. Mediante actividades educativas con estudiantes y guías de turismo; y colaboraciones con diversas organizaciones académicas y científicas, buscamos generar un impacto positivo tanto en la naturaleza como en la sociedad».
En 2023, Descubriendo postuló el proyecto «Río Con-voca» al programa Fondo Común Regenerativo de Fundación Lepe, siendo uno de los siete proyectos adjudicatarios, lo que les otorgó apoyo financiero, técnico y comunicacional. Este beneficio les permitió generar un nuevo impulso para preservar la riqueza natural de la zona a través de estrategias que no solo eduquen, sino que también involucren activamente a la comunidad en la toma de decisiones para garantizar un futuro sostenible. A través de este proyecto, se busca fortalecer la conexión profunda y significativa entre la comunidad y la cuenca del Cochrane, reconociendo su importancia ecológica, cultural y social.
“Un eje central es nuestro programa de educación ambiental para observar, habitar y proyectar el río a través de actividades al aire libre, formativas y comunitarias. Hemos llevado a cabo actividades como consultas participativas, remadas comunitarias en kayak, talleres de formación para guías turísticos y de vida al aire libre, entre otras” comenta Restrepo.
Un aspecto clave del éxito de «Río Con-voca» ha sido su gran capacidad para trabajar participativamente con diversas entidades y organizaciones comunitarias. Este enfoque colaborativo ha permitido crear alianzas estratégicas con múltiples actores, desde organizaciones locales como Club Náutico Escualo, la Municipalidad de Cochrane, Pulso Austral, e instituciones académicas y científicas, generando un impacto más significativo y duradero a través del diálogo y la cooperación.
Un ejemplo de esto es la colaboración del Centro de Investigación en Ecosistemas de la Patagonia (CIEP), quienes los apoyan en la búsqueda de levantamiento y sistematización de información sobre la cuenca del río Cochrane y la que se recoge a partir de las actividades comunitarias como los análisis periódicos del agua para evaluar su calidad y detectar posibles fuentes de contaminación. Estos datos son fundamentales para diseñar e implementar medidas preventivas y correctivas para el cuidado del río y desarrollar estudios y proyectos de investigación sobre la ecología fluvial. Esta colaboración permite aplicar conocimientos científicos avanzados en las acciones de restauración y ofrece a los estudiantes de Cochrane la oportunidad de involucrarse en proyectos de campo, integrando teoría y práctica.
Según Carmen Figueroa, vecina de Cochrane y quien colabora en en la toma de muestras, “es importante que la comunidad se involucre en el cuidado y respeto del entorno donde vivimos. Conocer la calidad del agua permite a las personas entender mejor el impacto de sus actividades diarias en el medio ambiente y fomenta un sentido de responsabilidad compartida. Esta participación activa ayuda a proteger nuestros recursos naturales y asegura un entorno más saludable para todos».
La educación ambiental es otro de los pilares fundamentales del proyecto. «Río Con-voca» organiza talleres, charlas y actividades educativas con la Escuela Hernán Merino Correa y el Liceo Bicentenario Austral Lord Cochrane de Cochrane, donde los niños y jóvenes conocen la historia cultural y el origen del río y sus aguas, para sensibilizar a la comunidad sobre la importancia de cuidar los ríos y su entorno, promoviendo una cultura de respeto y cuidado del medio ambiente. Han realizado caminatas por la orilla del río con más de un centenar de niños y niñas de la Escuela, dialogando sobre el derecho al acceso público a ríos y lagos y experimentando en terreno los obstáculos de accesibilidad como los cercos que impiden el paso, las gestiones para solicitar permiso para pasar y la contaminación que en algunos casos hace poco seguro caminar o bañarse. Roxana Armijo, profesora de la Escuela Hernán Merino de Cochrane, la experiencia vivida con el equipo de Descubriendo relata su experiencia explicando que “a menudo, en nuestra vida cotidiana, incluso en lugares cercanos como Cochrane, muchas personas, especialmente los jóvenes, no conocen plenamente los recursos naturales que tienen al alcance de la mano. Contar con un grupo como Descubriendo, que facilite el acceso a estos lugares es fundamental. Nos ayudan a los niños, jóvenes, y adultos a disfrutar y conectar con el río, comprendiendo su importancia y aprendiendo sobre el cuidado que debemos tener con él. Para los profesores, estas experiencias son una oportunidad para fomentar la creatividad y enriquecer nuestras metodologías de enseñanza”.
«Río Con-voca» es mucho más que un proyecto de conservación ambiental; es una invitación a la comunidad para reconectar con la naturaleza y asumir un rol activo en la protección y restauración de los ecosistemas fluviales. A través de la regeneración ecológica, la educación ambiental y la participación ciudadana, este proyecto busca construir un futuro más sostenible y armonioso para todos y todas.
