Con más de ochenta organizaciones con representantes de Costa Rica, Colombia, Perú, México, Estados Unidos y Chile, se celebró el primer encuentro en torno al cuidado de las aguas de las cuencas de Chile.
Cinco mil personas llenaron el foro de la Universidad de Concepción, acompañando diversas organizaciones en el cierre del festival regenerativo “Somos Cuenca 2023”, realizado en Concepción y Talcahuano entre el 11 y el 19 de noviembre. Esta iniciativa, que generó varias actividades paralelas como diálogos y conversatorios, talleres de arte y ciencia, caminatas, stands y música en vivo con Kuervos del Sur y Flor de Guayaba; se realizó con el fin de crear y fortalecer los puentes para la colaboración entre personas y organizaciones preocupadas por la conservación de los ríos y montañas que dan vida a las cuencas.
A través de espacios de encuentro simultáneo en distintos escenarios de la cuenca del Biobío, se congregaron distintas iniciativas, proyectos y actores que buscan regenerar la relación del ser humano con la naturaleza. Además, el proyecto GEF Humedales Costeros Urbanos, Chilebirds, Fundación Bandada, en conjunto con organizaciones locales, celebraron la llegada de las aves migratorias a los humedales del Sistema Rocuant-Andalién durante el Festival de Aves.
Uno de los hitos de cierre fue el conversatorio magistral “Ríos como territorios en disputa: oportunidades para su regeneración” en el que expusieron Monti Aguirre, de International Rivers (Colombia); Danielle Perry, geógrafa de la University of Northern Arizona (EEUU); Fernanda Purrán, Malen Leubu (Alto Biobío, Chile); Juan Pablo Orrego, ONG Ecosistemas; Ana Araneda, consejera regional del Biobío, y Verónica Morales, directora ejecutiva Fundación Lepe, quien enfatizó en la importancia de estos encuentros que “nos permiten reflexionar en comunidad sobre los grandes desafíos que enfrentamos en términos socioambientales, pero a su vez las grandes oportunidades y transformaciones positivas que se generan a través de comprender que vivimos en un sistema integrado complejo que requiere tomar acciones bajo un marco de Desarrollo Regenerativo que priorice colocar la VIDA de los diversos ecosistemas y especies en el centro”.
El Festival superó todas las expectativas según los equipos organizadores. “Lograr fortalecer el trabajo territorial, articulando, visibilizando e inspirando a la acción a más personas y organizaciones, es uno de nuestros principales objetivos” señala Paulo Urrutia, director ejecutivo de Bestias del Sur Salvaje. Fortalecer el vínculo responsable y relaciones saludables con la naturaleza es uno de los principales objetivos de esta organización. Por esta razón, el evento cerró con un descenso por el río Biobío en balsas que, según señalan “es uno de los principales desafíos de esta época: garantizar el acceso a la naturaleza”.
Un sueño que, para Bestias del Sur Salvaje, es el cierre de un ciclo con “Somos Cuenca; Habitantes del Biobío”, proyecto apoyado por el programa Fondo Común de Fundación Lepe, que abre nuevos portales de acción. Este proyecto multidisciplinario, se ha convertido en una iniciativa ciudadana innovadora basada en la colaboración y arduo trabajo, en la que se han sumado una centena de reconocidos actores nacionales e internacionales. Entre otras cosas, durante el festival se lanzó, en alianza con el proyecto Comunidades Sustentables de la Universidad de Concepción (UCO 2195), el mapa ilustrado «Relatos de interdependencia en la cuenca del Biobío», la investigación “Hacia los derechos del río Biobío” y la futura aplicación colaborativa “101 cuencas”. Para Rodrigo Herrera, director ejecutivo de UCO 2195, el festival “constituyó una muy buena vitrina para mostrar las potencialidades de la articulación universidad-comunidad, a partir del trabajo conjunto, en lo que es un desafío real y concreto para las casas de estudios”.
Este evento ciudadano logró generar espacios de encuentro para aquellas iniciativas que buscan transformar la forma de hacer política pública y el enfoque de las legislaciones que dan un marco de protección o (des)protección de la naturaleza, en especial nuestros ríos. Entre ellas se encuentra la Ley de Estadios Naturales que busca promover un acceso responsable a la naturaleza. A su vez, la iniciativa Ríos Protegidos agrupa a diferentes organizaciones de la sociedad civil, centros de investigación, universidades, y profesionales, de diversas áreas de estudio y localidades a lo largo de Chile, dedicadas a la protección de los ecosistemas de agua dulce. La iniciativa nació el 2022, reconociendo la historia que muchas organizaciones han forjado en torno a los ríos, visualizando la necesidad de contar con un equipo de trabajo que se focalizara en aspectos legislativos, generando espacios para vincular a la ciencia y la comunidad, para así impulsar campañas de protección de manera cohesionada.
A través de esfuerzos colaborativos, interdisciplinarios y a diferentes escalas, buscan fortalecer la protección de los ríos del país mediante la aplicación de las herramientas existentes, reconociendo sus brechas y oportunidades; e impulsar una nueva legislación sobre ríos protegidos y restaurados. Nicole Mansuy, abogada del equipo técnico legal de la iniciativa, menciona que “se busca abrir la discusión en torno a la necesidad de fortalecer la tutela ambiental de los ríos y sus ecosistemas asociados, a través de una nueva categoría legal denominada Río Protegido. Durante el festival dieron a conocer su importante trabajo e invitaron a sumarse a esta tremenda campaña a través de sus redes sociales y www.riosprotegidos.cl”.